Ella, una mujer simple y hermosa, separada; él , un hombre común y corriente, casado, padre de dos niños, se conocieron de casualidad, una tarde de verano, siempre se encontraban en algún lugar escondido de la ciudad, los miércoles a la misma hora, las 4 de la tarde, al comienzo solo conversaban de como les fue el día, en el trabajo, cosas cotidianas de la vida, hasta que él siempre tomaba la iniciativa, se acercaba a ella, con delicadeza, la tomaba de las manos, le besaba en la frente, en sus mejillas, también besaba sus labios,la tomaba de la cintura y lentamente traía hacia él su cuerpo ,ella se sentía profundamente atraída hacia él y lo deseaba desde el primer día, con cada mirada suya sentía un fuego intenso en su interior, luego de unos besos apasionados y de acariciarse mutuamente , hacían el amor como si no existiera nadie mas que ellos dos, solos en el mundo.
Transcurridas algo más de 2 horas, de puro amor, pura pasión, se vestían, se miraban, se besaban y se despedían, para volver cada uno a su vida, su rutina, la dura realidad.
Transcurridas algo más de 2 horas, de puro amor, pura pasión, se vestían, se miraban, se besaban y se despedían, para volver cada uno a su vida, su rutina, la dura realidad.
uf que horrible volver a la dura realidad!! por qué no se podrá quedarse en esos momentos!!!
ResponderEliminarme gustó como escribes
nos estamos leyendo
besos